16.7.06

Nómadas de camino

Dos años de experiencias de vida aquí, me han permitido conocer de forma más experimental y fundamentada Italia, los italianos, el idioma y sobretodo el sur. He de concluir, que efectivamente entre otros países de la vieja europa, se aproximan más al modo de vida español, pero que en absoluto son (ni en presencia, ni en carácter) como los españoles. Hay demasiados matices que perfilan la diferencia. Entre otras cosas su "dolce vita", que realmente existe, más que incluir la siesta y la diversión, se basa en su capacidad de mostrar y seducir a los demás. Las cervezas las toman con cuentagotas y las comparten a medias en las comidas, que suelen ser pantagruelicas. Les gusta mucho hablar, y no pierden oportunidad para hacerlo; incluso cuando van conduciendo, le sacan gran partido al móvil. Aman la imagen hasta tal punto, que la preparación de los regalos es en sí para ellos, una pequeña obra de arte a exhibir. Me gusta italia, me divierte como hablan y negocian con sus teléfonos; lo que se dicen cuando se quieren y cuando se odian...
Pongo un punto y aparte, pues cuando termine el verano, tendré que cambiar de registro y de gentes obligatoriamente: me requieren en la Universidad, y amí no me queda otra que obedecer. Serán momentos difíciles, como otros muchos lo han sido ya, pero en este caso aún más por mis niños... De momento, tan solo me espera un verano itinerante que inicia el 17 llevando coche y enseres hasta la mitad de italia, tomando el barco en las proximidades de Civitavecchia, despertándome en Barcelona, de nuevo en coche hasta Zaragoza, de allí a Madrid, luego a Plasencia, y por fin a la Perezosa en Cádiz, más o menos el 23 de julio. Será un trayecto de nómadas, como otros tantos, que habrá que quemar en etapas, con dos niños ya expertos en viajes, pero en definitiva dos niños.
Comunque, ci sentiamo tra l'estate!: Volveré a estos lugares al final de agosto.