Yo he visto a un hombre
prepararse para la batalla,
ordenar sus cosas para hacer
la guerra..., y también para la paz.
Yo lo he visto hoy mismo,
y nada hay de poético en ello,
es así, que me cuesta hablar.
Lo he visto partir,
darme un beso
después de amar,
y él, no me ha visto llorar,
lo aseguro, ni siquiera
me ha oído hablar...
Yo he asisitido perpleja
a sus preparativos,
mientras inconscientes
los niños, jugaban a matar.
Lo aseguro, él ni siquiera
me ha oído hablar.
Las canciones no calman,
ni siquiera la frívola
cotidaniedad , y del revés
caminan los versos,
mientras se recuerda
lo que un hombre hace
cuando se prepara
para atacar.
Yo he visto su mueca,
e impasible, he visto
el gesto indecente
de los demás, y
consciente digo
que si los hijos se hacen
con amor, las guerras
se hacen con la paz
Yo he visto a otro hombre
salir, esta vez para negociar
he visto su cara, y le he visto
también preparar: ajustar
todas las cosas,
y su mirada ajustar.
Y si de la mirada se trata,
prefiero la de la paz,
quien la batalla prepara,
guarda también
una mirada de paz.
Pues muchas conversaciones
de a diario, inician con gestos
de amenaza, incomprensibles
empiezan con gestos de batalla,
he de decir que también
esas veces he visto:
preparase y pelear,
a unos vencer
y a otros ganar.
Mi amor yo lo batallo,
por él lucho,
como la que más. ABPG