27.10.09

Vienen  aquí,
revoloteando en
la noche, miles de
blancas mariposas
que a libar el dulce 
licor te incitan.
Alas como brazos, que 
acompasadamente
se retuercen
mostrándote su 
dulce compañía.
Se corren las cortinas 
mientras uno o más
fantasmas huyen de 
ti maldiciendo. 
Silenciosas las 
campanas se apagan
hasta que con otro
día, insolente
la luz explota.
Agazapadas en 
las esquinas esperan
las mariposas 
otras tantas noches.
Mientras de momento,
se camuflan 
ABPG